Estimados y estimadas oyentes bienvenidos a esta propuesta literaria dentro del Proyecto de Centro “Curar la desmemoria” del IES Alfonso II.

Somos alumnos de 3ºESO y queremos compartir con ustedes nuestra aproximación a ese periodo de profunda desolación y dolor de la Historia como fue la Segunda Guerra mundial y en especial el horror en los últimos años del genocidio al que conocemos como Holocausto. En esos años de terror no solo murieron más de seis millones de judíos, sino que también fueron hechos prisioneros nueve mil trescientos españoles y españolas que fueron deportados a dichos campos de concentración y de los cuales más de dos tercios no sobrevivieron.

La literatura nos ha permitido conocer la historia desde otro punto de vista, desde dentro, lo que Unamuno llamaría la intrahistoria, es decir la vida callada de millones de personas que han vivido y padecido este periodo histórico. Nos acercaremos a esa terrible experiencia de miles de españoles en campos de concentración a través de los ojos de personajes reales, como Antonio Hernández Marín, y de otros personajes inspirados en valientes personas reales.

Desde diferentes asignaturas hemos abordado este periodo y con este proyecto queremos no no solo honrar la memoria de los miles de víctimas del Holocausto sino también cumplir con uno de los juramentos que los supervivientes se hicieron: contar para no olvidar.

A través de las palabras y la imagen en obras como la novela gráfica Maus ,premiado con el Pulitzer, la emotiva historia de Erika, basada en historia real o el cómic Deportado 4443 inspirado en el estremecedor relato del murciano Antonio Hernández Marín, la novelita Una vez inspirada en la figura del pediatra polaco Janus Korckzac , que cuidó niños en un orfanato o el libro El niño de pijama de rayas, también llevado al cine con gran éxito, ahondaremos en estos aciagos días que esperamos nunca, nunca más vuelvan a repetirse.

Esperamos que os gusten los distintos puntos de vista que como alumnos hemos ido aportando sobre las obras, con la intención de transmitir lo que aprendimos y sobre todo conseguir que, al menos sus familiares vean y sientan que se ha cumplido su petición, que no se ha silenciado su historia poque el Holocausto no solo destruyó la vida de millones de personas, sino también las de sus familiares que asistieron a una destrucción sin precedentes de las ilusiones de toda una generación.

Gracias por su atención y pedimos de antemano disculpas por los posibles errores.

Comentarios